COMO SI NO HUBIERA UN MAÑANA

"Como si no hubiera un mañana". No hay mejor título para esta obra que nos trae la compañía Paraninfo 58 a Nave 73. Vivamos como si no hubiera un mañana... porque no lo hay. La propuesta que nos traen son tres historias de amor en el fin del mundo, en un mundo apocalíptico donde todo el mundo mata sin compasión por sobrevivir. O matas o mueres.


En escena sólo unas escaleras y tres actores que harán los diferentes personajes, entre los que en mi opinión destaca especialmente Juan Blanco, pero no puedo olvidar a Joe Manjón y a Sara Martínez; y una puesta en escena muy valiente usando apenas una música en las antiguas pero no desaparecidas cintas de casete y la luz de sus linternas, creando una leve ansiedad en el público, que entra de lleno en esa situación apocalíptica creada por la oscuridad en la mayor parte del escenario y las luces que se mueven continuamente según los movimientos de los personajes que sujetan dichas linternas. Todo este minimalismo contribuye enormemente a crear la atmósfera necesaria. Y en esta puesta en escena se introducen los textos, que también son para hacer una mención aparte. Tres historias muy buenas, bonitas sin ser empalagosas (no olvidemos que estamos en el fin del mundo y la cosa no está para amoríos) aunando en una mezcla perfecta momentos de drama con dosis de humor en ocasiones algo negro.


En resumen, muy pocos elementos en su pequeña y justa medida que acaban creando algo grande. Conclusión: si pueden vayan a verla que no hay un mañana ya que quedan sólo dos días.